Después de varios años, hemos decidido rediseñar completamente nuestra página web. Para nosotros es una herramienta importante para explicar lo que hacemos y dar las razones de las decisiones que tomamos cada día. Creemos que es importante hacerlo en un momento en el que están ocurriendo tantas cosas, a nuestro alrededor, que tienen que ver con el tema del desarrollo.
La conclusión de la COP26 ha hecho que se preste aún más atención a las cuestiones del cambio climático, la sostenibilidad, el papel de la "comunidad internacional" y el multilateralismo.
Debemos responder a los retos del cambio y, más allá del debate y del choque entre visión y pragmatismo, ahora somos conscientes de que lo que ocurrirá en las próximas décadas transformará nuestras sociedades independientemente de que los procesos de cambio tengan éxito o fracasen.
Vemos ante nosotros un gran potencial para construir sociedades mejores, pero también el riesgo de reforzar las injusticias y las desigualdades entre las sociedades, las comunidades y los individuos que tienen los recursos y la capacidad de adaptarse, y los que simplemente sufrirán estos cambios.
¿Cómo encaja la acción del CISP en este contexto? Hemos pensado adoptar un eslogan que, creemos, describe especialmente bien lo que es el CISP y cómo pretende entender su propia identidad y forma de trabajo. El lema es Derechos, Hechos, Personas.
DERECHOS
En un momento de grandes transformaciones, los derechos son la base sobre la que se construye la promoción y la evaluación de los efectos de las acciones que quieren fomentar el cambio. Cuando se habla de luchar contra el cambio climático o de promover las capacidades de adaptación de nuestras sociedades, la cuestión de la justicia sigue siendo primordial. Si las inversiones y los cambios promovidos para hacer frente al cambio climático excluyen a las zonas y a las personas más pobres, el derecho al desarrollo y el bienestar que todos deben compartir, se crearán las condiciones para nuevas crisis y conflictos.
Frente a los conflictos y la fragilidad de las instituciones en gran parte del mundo, quizá estemos ahora en el punto más bajo del impulso de la comunidad internacional para hacer oír su voz de forma coherente. Innumerables análisis subrayan hasta qué punto estos son precisamente los contextos en los que los objetivos de la Agenda 2030 parecen más lejanos e inalcanzables.
Para nosotros, poner los derechos como base de nuestras acciones significa centrar nuestra atención en los que salen perdiendo debido a las transformaciones en curso, y hacia las situaciones de crisis y marginalidad para responder a las necesidades que tenemos delante.
HECHOS
En la historia del CISP siempre hemos tratado de no perder de vista la concreción de nuestras acciones en respuesta a las necesidades y el profundo conocimiento de los contextos en los que actuamos. En particular, siempre hemos tratado de entender la situación y los intereses de aquellas comunidades para las que es más difícil encontrar un lugar en las agendas internacionales. Es crucial situar nuestra acción dentro de los objetivos colectivos, pero también lo es ser capaces, como organización, de responder a la pregunta: ¿hemos sido capaces, con nuestras acciones, de contribuir positivamente a mejorar la calidad de vida de las personas y comunidades que deberían beneficiarse de ellas?
Los hechos también significan dar cuenta de lo que hacemos y de sus efectos en quienes nos han dado los recursos para operar y en las comunidades a las que se dirigen esos programas, haciendo todo lo posible para que los efectos se midan y comuniquen claramente.
Esto significa proporcionar a quienes quieren conocernos información sobre cómo funciona el CISP y cuáles son sus estructuras, principios y mecanismos operativos.
PERSONAS
La atención a las comunidades en las que operamos significa comprender las experiencias y visiones de quienes deben beneficiarse de nuestra ayuda. Partimos de la idea de que nuestras acciones pueden tener un impacto si favorecen y potencian las inversiones y energías de esas comunidades.
El CISP son las personas que lo forman y está compuesto por colegas de muy diversas nacionalidades, en su mayoría procedentes de los países en los que operamos. Juntos compartimos una ética profesional de calidad y competencia que ponemos a disposición de nuestros beneficiarios, que son la razón de nuestro trabajo.
Intentamos explicar todo esto también a través de nuestra nueva página web.